- Módulo 1 : invernadero.

- Módulo 2 : sala de estar (deporte, relajación, refectorio, servicios).

- Módulo 3 : sala de investigación científica.

- Módulo 4 : piscina con plantas.

- Módulo 5 : almacenamiento.

- Un campo de paneles solares para suministrar energía.

- Un rover que se utilizará para la exploración científica.

- Un tren magnético transportará a los astronautas y el equipo lunar para evitar problemas con el polvo lunar.

- Un cohete podrá hacer el viaje de ida y vuelta con la Tierra.

- Los módulos serán transportados por el cohete utilizando técnicas de origami para ahorrar espacio.

Cráter Shackleton

Elegimos el cráter Shackleton por la gran cantidad de agua helada y sol para cultivar las plantas.

También es ideal para investigar la historia de la Luna.

Los módulos de la base estarán construidos con polietileno para proteger a los astronautas.

Para ahorrar espacio, estos paneles de polietileno llegarán plegados en origami en la tapa del cohete.

El agua se obtendrá a través del hielo del cráter Shackleton.
Las aguas residuales también se reciclarán.
También se necesitará una reserva de agua de la Tierra.

Inicialmente, los alimentos procederán de la Tierra.
Luego, gracias al invernadero, cultivaremos frutas y verduras que no requieren mucha agua. La espirulina producida por la cuenca también dará alimento.
Un sistema de persianas opacas se abrirá y cerrará para dar el sol adecuado a las plantas.

El sol brilla todo el tiempo cerca del cráter Shackleton.
Podemos recuperar energía mediante paneles solares orientables que seguirán la trayectoria del sol.
Un sistema de baterías almacenará energía para devolverla cuando se produzcan averías o eclipses.

Habrá 4 astronautas en nuestro equipo.
Se probarán las distintas soluciones para proporcionar aire.
Será necesaria la electrólisis.
Podremos respirar gracias a las algas de la cuenca. Se necesitan 8 m2 de algas por astronauta, por lo que la cuenca tendrá que medir 32 m² (8 m² x 4 astronautas = 32 m²).
En el invernadero se necesitarán 13 m² de plantas por astronauta, por lo que el invernadero tendrá que cultivar 52 m² de plantas.
En caso de problema, un sistema sustituirá al otro.

Hacen falta 20 cm de polietileno para proteger los hábitats de la luz solar y la radiación del espacio, así como de los meteoritos.
Una cuenca con vegetación protegerá a los astronautas en caso de tormentas solares.