San Cernin Pamplona-Navarra España 16 años 4 / 2 Español Luna
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Autores: María, Izar, Ander, Julen
OBJETIVO:
El objetivo de este experimento es demostrar si la Luna es habitable. Para que la misión sea un éxito, la vida en la base debe ser posible durante un periodo de tiempo largo, de cinco a seis años, comprobando así si las plantas pueden crecer correctamente y si los humanos pueden sobrevivir sin sufrir daños o secuelas. Si todo sale como esperamos, cabe la posibilidad de que sea posible la vida en otros astros como satélites o planetas. En un futuro, incluso podrían acabar transformándose en otras regiones, como las que hay en la Tierra, habitadas por el ser humano.
CONDICIONES:
Sin embargo, si bien es cierto que la vida podría ser posible, hay unas cuantas complicaciones. La Luna carece de una atmósfera como la Tierra. Debido a esto, son frecuentes grandes impactos por micrometeoritos. Los astronautas quedarían expuestos a temperaturas extremas y altos niveles de radiación. Por lo tanto, la base debe estar equipada y preparada para garantizar la supervivencia del ser humano.
DISEÑO EXTERIOR:
Para empezar, la base cuenta con 4 áreas, de forma semicircular, equipadas para distintas funciones y un invernadero central que conectará todas las habitaciones:
Dormitorio, donde descansarán los astronautas y tendrán todas sus pertenencias necesarias.
Un laboratorio de química, para crear agua (a partir de moléculas de hidrógeno y oxígeno) y realizar experimentos.
Sala de telecomunicaciones, donde se encontrará la tecnología necesaria para mantener comunicación con las bases espaciales terrestres.
Núcleo de energía, donde se almacenará la energía solar generada por las placas solares del techo de la base para alimentar los equipos electrónicos.
PLANIFICACIÓN:
Una ubicación ideal podrían ser los alrededores del cráter "Aston" para comprobar la existencia de hielo, ya que últimamente se valora la hipótesis de que dentro de los cráteres pueda haber agua congelada. Aunque no se encuentre en estado líquido, podría ser una gran ayuda para empezar a asentarse.
La capa exterior de la base tendrá propiedades reflectantes contra la radiación solar, de forma que haga un efecto aislante con respecto a las temperaturas y ninguna de las dos cosas suponga un peligro para los astronautas.
Ya que no podemos depender de las misiones de reabastecimiento, pues en la luna no hay existencias de los suministros básicos, tendremos un invernadero donde cultivaremos varios especímenes de plantas que nos proporcionarán tanto alimento como oxígeno.
El agua se fabricará en una de las habitaciones, abastecida con equipo de laboratorio.
La energía la obtendremos a través de una gran instalación de paneles solares y dispositivos capaces de almacenar la electricidad.
Los desechos humanos se aprovecharán para la fabricación de abono que alimentará la tierra del invernadero.
Con la misma tecnología que se encuentran en las naves espaciales, a través de una antena sobre la sala de comunicaciones se podrá mantener la comunicación con la Tierra.
REQUISITOS NECESARIOS PARA LOS ASTRONAUTAS Y EL EQUIPO:
Queremos comprobar cómo sería el crecimiento de las plantas, haciendo experimentos sobre todo biológicos. Por lo tanto, necesitaremos personas con buena formación física, conocimientos de jardinería, biología, química y de construcción hasta que la base esté en pie, en pleno funcionamiento. El desplazamiento lunar es complicado debido a la baja gravedad, por lo que también serán necesarios algunos medios de transporte terrestres para avanzar rápidamente por la superficie del satélite. Los vehículos necesarios serán, idealmente, uno o dos coches eléctricos que nos permitan investigar el relieve, como los cráteres y formaciones rocosas.
Traducción al inglés
Autores: María, Izar, Ander, Julen
AIM:
El objetivo de este experimento es demostrar si la Luna es habitable. Para que la misión sea un éxito, la vida en la base debe ser posible durante un largo periodo de tiempo, de cinco a seis años, comprobando así si las plantas pueden crecer adecuadamente y si los humanos pueden sobrevivir sin sufrir daños o consecuencias. Si todo va como esperamos, es posible que haya vida en otras estrellas, como satélites o planetas. En el futuro, incluso podrían acabar convirtiéndose en otras regiones, como las de la Tierra, habitadas por humanos.
CONDICIONES:
Sin embargo, aunque es cierto que la vida podría ser posible, existen algunas complicaciones. La Luna carece de atmósfera como la Tierra. Por ello, son frecuentes los grandes impactos de micrometeoritos. Los astronautas estarían expuestos a temperaturas extremas y altos niveles de radiación. Por tanto, la base debe estar equipada y preparada para garantizar la supervivencia de los seres humanos.
DISEÑO EXTERIOR:
Para empezar, la base cuenta con 4 zonas, de forma semicircular, equipadas para distintas funciones y un invernadero central que conectará todas las estancias:
Dormitorio, donde los astronautas descansarán y dispondrán de todas sus pertenencias necesarias.
Un laboratorio de química, para crear agua (a partir de moléculas de hidrógeno y oxígeno) y realizar experimentos.
Sala de telecomunicaciones, donde se encontrará la tecnología necesaria para mantener la comunicación con las bases espaciales terrestres.
Núcleo energético, donde se almacenará la energía solar generada por los paneles solares del tejado de la base para alimentar los equipos electrónicos.
PLANIFICACIÓN:
Un lugar ideal podrían ser los alrededores del cráter "Aston" para comprobar la existencia de hielo, ya que recientemente se ha evaluado la hipótesis de que pueda haber agua congelada en el interior de los cráteres. Aunque no se encuentre en estado líquido, podría ser de gran ayuda para comenzar a asentarse.
La capa exterior de la base tendrá propiedades reflectantes frente a la radiación solar, por lo que tendrá un efecto aislante con respecto a las temperaturas y ninguna de las dos cosas supondrá un peligro para los astronautas.
Como no podemos depender de las misiones de reabastecimiento, ya que no hay reservas de suministros básicos en la Luna, dispondremos de un invernadero donde cultivaremos diversos especímenes vegetales que nos proporcionarán tanto alimentos como oxígeno.
El agua se fabricará en una de las salas, dotada de equipos de laboratorio.
Obtendremos la energía mediante una gran instalación de paneles solares y dispositivos capaces de almacenar electricidad.
Los desechos humanos se utilizarán para hacer compost que alimentará el suelo del invernadero.
Con la misma tecnología de las naves espaciales, se puede mantener la comunicación con la Tierra a través de una antena situada sobre la sala de comunicaciones.
REQUISITOS NECESARIOS PARA LOS ASTRONAUTAS Y EL EQUIPO:
Queremos comprobar cómo sería el crecimiento de las plantas, haciendo experimentos, sobre todo biológicos. Por lo tanto, necesitaremos personas con buena preparación física, conocimientos de jardinería, biología, química y construcción hasta que la base esté en pie, plenamente operativa. El desplazamiento lunar es complicado debido a la baja gravedad, por lo que también será necesario algún medio de transporte terrestre para moverse rápidamente por la superficie del satélite. Los vehículos necesarios serán idealmente uno o dos coches eléctricos que permitan investigar el relieve, como cráteres y formaciones rocosas.
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