Nuestro proyecto es una maqueta que deja ver cómo nos gustaría que fuese nuestro campamento lunar en caso de tener que hacerlo. 

Porque le encanta vivir aventuras y explorar lo que poca gente ha podido ver con sus ojos y así poder contar más información acerca del tema. 

En la cara oculta de la Luna

Porque es un lugar al que menos gente ha tenido respecto de los demás lugares y nos gustaría explorarlo. 

Con máquinas especiales que llevaremos en nuestra nave espacial y que nos ayudarán a hacer todo el proceso de instalación.

Usaríamos los recursos naturales de la Luna para de forma que podamos sacarle el mejor partido a todos. No nos llevaríamos muchas cosas, porque nos gustaría que casi todo nuestro campamento esté hecho con materiales propios de allí.

Con un transmisor de ondas que genera un campo electromagnético que protegerá el campamento de posibles amenazas externas.

En la Luna, los recursos son muy escasos, pero durante las largas misiones lunares, los astronautas no pueden depender de las misiones de reabastecimiento desde la Tierra.

El transmisor nos servirá como una especie de burbuja que proporcionará el oxígeno necesario para pasar el tiempo que dure la expedición. La energía la sacaremos de unos generadores que llevaremos dentro de la nave y que duran alrededor de seis meses. Y sobre la nutrición, nos llevaremos toda la comida espacial posible y agua suficiente para pasar allí los seis meses hasta que se nos acabe la batería de los generadores.

Consejos de los mejores astronautas como Neil Armstrong, lo que ayudará a nuestros jóvenes viajeros a adquirir experiencia antes de tener que realizar las complicadas misiones que pueda proporcionar nuestro satélite.