Proyecto de aspecto futurista que emplea técnicas y toda una estructura viable y coherente. Es sencillo a los ojos y arroja una luz al final del túnel para quienes realmente lo entienden.
Buscamos combatir todas las adversidades que nos pueda deparar la Luna, haciendo esta misión más cómoda, segura y factible para los astronautas. Elegimos establecernos en uno de los polos, porque estos lugares reúnen la mayor cantidad de requisitos para construir una base lunar. Lo que más nos importa es el bienestar de todos los hombres de esta misión, proporcionándoles una sección de la base lunar con el objetivo de reducir los efectos que un entorno de baja gravedad tiene sobre el cuerpo humano. También proporcionar una higiene similar a la que tenemos en la Tierra, proporcionando un cuarto de baño especial construido para funcionar en un entorno de baja gravedad.
Hemos construido y diseñado dos coches con un objetivo que es muy crucial para esta misión. También proporcionamos una señal de satélite a nuestros astronautas con un método ya muy estudiado que es casi infalible. Los astronautas recibirán oxígeno a través de las bombonas adquiridas previamente. Disponen de una válvula especial que mide y regula los niveles de oxígeno en la base. Es importante disponer de una fuente estable de alimento biológico.
El resto del objetivo principal de la base es el ocio, el trabajo y la organización de los principales elementos de esta misión.

Vamos a construir nuestra base en el polo sur, en un cráter con el centro ligeramente plano.
Este lugar nos permitirá estar cerca de una fuente de hielo, que fundiremos, filtraremos y almacenaremos para su posterior uso en el día a día de los astronautas.
Los astronautas van a permanecer en un cráter y, por tanto, conseguirán temperaturas más controladas y agradables para la supervivencia humana en la Luna.

Técnicas: Como técnica, hemos utilizado la impresión 3D, D shape. Se trata de un método de construcción digital que emplea una impresora 3D para arquitectura, para construir edificios enteros a escala. Esto ha sido posible gracias a la utilización de la técnica de deposición de materiales que permite que la estructura sea autosuficiente durante su construcción.
Diseño: Para el diseño de nuestra base, elegimos una forma catenaria, que se asemeja a un arco geométrico. Esta forma permite al edificio distribuir cualquier fuerza a su base. Con este diseño obtenemos una estructura mucho más fuerte y estable.
Materiales: Para construir nuestra base utilizaremos una mezcla de trozos de meteoroides y rocas. Una cápsula hinchable, fácil de montar y de gran durabilidad en un entorno lunar.

La superficie de la Luna está cubierta de fragmentos rocosos y polvo, lo que se denomina regolito. Este material mezclado con resina se utilizará para construir nuestra base lunar con el fin de protegerla mejor contra la radiación, los asteroides, entre otros tipos de amenazas.
Para proteger a nuestros astronautas de las oscilaciones extremas de temperatura utilizamos un tipo de resina negra, que absorbe el calor y mantiene un nivel de temperatura estable en nuestra base.
En caso de daños en la estructura, los astronautas dispondrán de robots autónomos que repararán cualquier daño estructural.

Para producir agua, utilizamos una estación que funde y filtra el hielo previamente troceado, creando agua potable que los astronautas pueden beber.

Para los alimentos, optamos por construir una granja con un sistema hidropónico, que es una técnica que sólo requiere agua y minerales para cultivar plantas. Esta solución acuosa fluye luego por los sistemas de tuberías que conducen al lugar donde los astronautas plantarán las semillas. Las plantaciones se limitarían a hortalizas de poca altura, como coles, lechugas, hierbas, fresas y otras.

Para producir energía, recurriremos a la famosa energía solar para alimentar nuestra base y poder utilizar todos nuestros instrumentos y artilugios. Los colocaremos en lugares estratégicos para que tengan la máxima eficiencia. La energía producida por los paneles solares pasará por un transformador y se almacenará en la batería. Desde allí, se distribuirá a toda la base. También tenemos un contador de energía para medir la energía utilizada.

Para disponer de oxígeno en nuestra base, habrá cantimploras de oxígeno almacenadas en la base. Estas bombonas expulsarán oxígeno a la base cuando la presión de oxígeno sea inferior a la deseada, y se detendrán cuando dicha presión esté en los niveles correctos.

El objetivo principal de la construcción de la base lunar es proporcionar análisis y recogida de un nuevo terreno/suelo para la exploración de minerales, y permitir futuros viajes a la Luna, donde los astronautas podrán permanecer durante un largo periodo de tiempo, nuestra base les proporcionará las condiciones básicas de vida.
Esta base también permitirá a los astronautas alcanzar objetivos científicos. Los científicos utilizan regolito lunar simulado y experimentan con diversas mezclas para encontrar una muestra con la consistencia adecuada. Las pruebas de durabilidad demuestran que las muestras pueden soportar temperaturas de hasta 114 grados y de hasta -80 grados centígrados, lo que obviamente requiere más pruebas. Por lo tanto, aseguramos que es adecuado para la construcción de la base lunar.

Desde muy temprana edad, la luna ha sido fuente de curiosidad. ¿Qué es? ¿Tiene agua? ¿Es posible vivir allí? Pues bien, algunas de estas preguntas ya tienen respuesta y muchas otras aún están por explorar, y es en la curiosidad en lo que se basará el objetivo de nuestra base.
Un día en nuestra base comenzará despertándose, bebiendo una taza de café y contemplando nuestro hermoso planeta desde la perspectiva de la Luna. Una vez satisfechas sus necesidades básicas, nuestro grupo de astronautas podrá hacer lo que mejor sabe hacer, que es investigar y empezar a responder a ciertas preguntas. De cara al siglo XXI, nos parece que las visitas a la Luna están cada día más cerca, por lo que nuestro grupo de astronautas tiene el deber de encontrar un buen lugar para estacionar nuestras naves espaciales. En el plano científico, seguimos teniendo preguntas a las que hay que dar respuesta. El hecho de que creamos que hay agua en estado sólido nos lleva a preguntarnos cómo es el ciclo del agua y si puede haber agua en estado líquido. Aunque ha habido actividad volcánica en la Luna, aún no sabemos cuándo se produjo y tampoco conocemos la edad exacta de la Luna. ¿Y tiene la Luna placas tectónicas activas? Responder a estas preguntas era uno de los objetivos de nuestros astronautas.
Con tanto trabajo que realizar, nuestros astronautas tienen que descansar, por lo que tienen que hacer algo de ejercicio para mantener los músculos activos, algo muy importante cuando se está en la Luna. También tienen libros y lugares cómodos para leer. A la hora de comer o cenar, nuestros astronautas tendrían que utilizar lo que han cultivado y racionalizar la comida. Utilizan este tiempo para socializar y mantener una conexión humana, importante para el bienestar mental. Cada día los astronautas tienen que enviar sus estudios a la Tierra, para que en la Tierra podamos ayudar a compartir estos conocimientos. El viernes habría una reunión entre los astronautas y el equipo de apoyo en la Tierra para elaborar un estado y debatir algunos problemas.
Al final del día, nuestros astronautas hablaban con sus familias y había un momento de relajación mental y física. Al fin y al cabo, si un día en la Tierra es difícil, un día en la Luna lo será aún más.