Un campamento base en la Luna se convertiría en el primer paso de la humanidad para iniciar el ambicioso e inspirador proyecto de la colonización del cosmos.

El AFS Moon camp acoge a 50 residentes que viven y trabajan tranquilamente. Espacios personales o familiares, dormitorios, cocinas y restaurantes, así como gimnasios, pabellones deportivos cubiertos, jardines interiores y salas de ocio proporcionan confort y calidad de vida. Se han creado un laboratorio científico y un centro de innovación para apoyar experimentos regulares y nuevos objetivos científicos. Los garajes y las salas de mantenimiento de vehículos atienden las necesidades de desplazamiento de la población y los proyectos de exploración lunar de toda la colonia. También hay un centro de control totalmente equipado. Incluye una sala de control, una estación de control de energía y una estación de suministro de aire y agua. Algunos de los edificios, como los dormitorios y el invernadero, están construidos bajo tierra para una mayor protección contra la radiación espacial. Otros se construyen en la superficie de la Luna. Esta política de construcción mixta responde a cuestiones de seguridad y financieras.

El módulo de paneles solares, construido en el valle cercano, es extremadamente importante para la sostenibilidad energética del campamento. Por ello, su diseño, construcción, funcionalidad y protección son muy importantes para la vida en la base lunar. Cerca de la AFS Moon camp hay un módulo de antenas de satélite que cubre las necesidades de comunicación de la base y un puerto espacial -sitio de lanzamiento y recepción de naves espaciales-.

Cerca de los polos lunares

Decidimos construir nuestro campamento lunar en el Polo Sur. Según las observaciones en órbita, el Polo Sur es la región más investigada de la Luna. Estas investigaciones primarias por satélite son datos importantes para este primer proyecto de colonia lunar. En el Polo Sur ya se han descubierto muchos minerales valiosos, incluido el hielo, que se utilizarían para la instalación y el funcionamiento de la base lunar. También está bañado por la luz solar durante largos periodos de tiempo -más de 200 días terrestres-, lo que constituye un importante recurso energético para alimentar toda nuestra base y equipos.

Los materiales lunares conocidos como el silicio, el magnesio, el aluminio, el manganeso y el titanio se utilizarían principalmente para toda la fabricación. De este modo, se reduciría el coste del transporte de materiales y equipos a la Luna. El regolito lunar, el polvo de la superficie y el polvo volcánico se utilizarían para fabricar ladrillos, para construir hábitats, lugares de trabajo y todos los módulos necesarios que forman el campamento lunar. Para ello se transportarían desde la Tierra manos robóticas e impresoras 3D. Además, se ha previsto construir los mismos equipos en la base, para cubrir las necesidades de reposición y desarrollo posterior.

Depósitos de agua en la superficie lunar: Para proporcionar una fuente de agua autosuficiente y fiable en la Luna, se recogería agua congelada de los cráteres que contienen depósitos de agua. El hielo recogido se fundirá y purificará eliminando cualquier otra sustancia, como toxinas.
Otra opción podría ser reciclar nuestros residuos de agua, de forma similar a lo que se hace actualmente en la ISS. A continuación se detallan los pasos de este procedimiento. En primer lugar, se captan las aguas residuales de los astronautas, como la orina, el sudor o incluso la humedad de su aliento. A continuación, se filtran las impurezas y contaminantes del agua. El producto final es agua potable que puede utilizarse para rehidratar alimentos, bañarse o beber.

Invernadero subterráneo: Proporcionaremos alimentos construyendo un invernadero lunar que contendrá verduras y frutas. Estará enterrado bajo la superficie lunar para que no lo destruyan los rayos cósmicos ni las erupciones solares. Las plantas podrán crecer allí sin tierra, con la ayuda de lámparas de vapor de sodio refrigeradas por agua que las ayudarán a desarrollarse aún más.
La ausencia de animales de cría en la Luna ha obligado a la gente a consumir sólo verduras y frutas. Las comidas a base de plantas, como una hamburguesa vegetal, son algunos de los posibles sustitutos. Las importaciones desde la Tierra son escasas y caras. La esperanza está puesta en las futuras granjas de cría de animales que podrían abastecer a la colonia con carne de verdad.

● Paneles solares
● Electrólisis
● Pilas de combustible de hidrógeno

Para suministrar energía al campamento lunar utilizaremos principalmente paneles solares. El exceso de energía que generen los paneles solares cada día podría utilizarse para cargar y almacenar baterías. También podría utilizarse para separar las moléculas de agua en átomos de hidrógeno y oxígeno mediante electrólisis. Durante las noches lunares se utilizarán pilas de combustible de hidrógeno, que combinan hidrógeno y oxígeno para producir electricidad, para cubrir las demandas energéticas de la base lunar.

● Electrólisis
● Casa verde y jardines

Para producir grandes cantidades de aire respirable utilizaremos el fenómeno de la electrólisis para crear oxígeno, pero como el oxígeno puro no es respirable tendremos que mezclarlo con otros gases para crear aire respirable.
Los astronautas producen dióxido de carbono al respirar, que puede eliminarse con ayuda de la tecnología del bidón de hidróxido de litio, como se utilizó en la misión Apolo 11.
Como en la base funcionarán tanto un invernadero como jardines interiores, un sistema bidireccional proporcionará el dióxido de carbono exhalado por los ciudadanos a las plantas y se llevará el oxígeno producido.

Un día típico para los residentes de la base lunar comienza con la higiene personal. Después desayunan, la primera de las tres comidas equilibradas del día que cubren sus necesidades nutricionales para una vida exoterrestre saludable.

Después de comer, comienza un exigente programa de trabajo con muchas tareas, como realizar o supervisar experimentos científicos, comprobar el funcionamiento de la base y los sistemas de soporte vital y mantener la comunicación con la Tierra.

Los días en la Luna serían realmente ajetreados y agotadores, pero, como todas las personas, los astronautas tendrán tiempo libre cada día y algunos fines de semana libres. El tiempo libre es muy importante para todos, porque es el momento en el que uno se entretiene y se divierte. En su tiempo libre, los astronautas podrían ver películas, jugar, leer libros electrónicos e incluso hablar con sus familias en la Tierra. Además, ver la Tierra orbitando sería algo emocionante.

El ejercicio también es una parte importante de la rutina diaria de los habitantes de la colonia lunar. Por término medio, los habitantes de la colonia deben hacer ejercicio dos horas al día. Debido a la microgravedad, el equipo que utilizan es diferente del que se usa en la Tierra. Por ejemplo, si algo pesa 70 N en la Tierra, en la Luna pesará menos de 10 N, por lo que hay que rehacer cada programa de ejercicios. Cada uno es libre de planificar su programa diario de ejercicios en función de las exigencias de su trabajo y de sus intereses personales.