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Planeamos hacer un campamento lunar desde el que los investigadores puedan aprender más sobre la Luna y, al mismo tiempo, sentirse cómodos. Sería un nuevo comienzo en el descubrimiento del espacio, el inicio de una nueva frontera. Nuestra base lunar estará equipada para acoger a 6 personas. También tendremos un invernadero para el oxígeno, alimentos naturales y hierbas medicinales por si un astronauta se pone enfermo. Utilizaremos un rover para obtener hielo de la superficie de nuestra Luna, que se utilizará para obtener agua. También utilizaremos la luz solar para obtener energía, energía que podrá almacenarse en baterías para su uso durante los eclipses lunares. Habrá un sistema de reciclaje para reutilizar el plástico, el metal, el agua y otros recursos valiosos.

Nuestro campamento lunar se construirá cerca del polo sur. La decisión se basa en la luz solar que reciben los polos lunares, lo que la convierte en un recurso casi infinito, y en la gran cantidad de hielo, una de las cosas más importantes que necesitamos para sobrevivir. Otro aspecto importante que se está considerando es el rango de temperaturas, de -50° a 0° C.

El equipo decidió aprovechar el regolito que se extraerá para construir la estructura. Utilizaremos un boceto en 3D y una impresora 3D a gran escala que construirá el campamento lunar a partir del suelo lunar. Sin embargo, no podemos utilizar únicamente suelo lunar, por lo que intentaremos traer lo menos posible de la Tierra. Los mini-rovers también podrían ser útiles en la construcción del Campamento Lunar.

Estar cerca de los polos lunares nos dará la ventaja de utilizar el hielo que se puede extraer con un rover. Un espejo redirigirá la luz solar hacia el panel solar del rover. También se puede utilizar un taladro caliente que derrita el hielo para luego recogerlo manual o automáticamente. A continuación, el agua se purificará mediante el sistema de reciclaje. Después de que una parte del agua se utilice para beber, para la electrólisis o para el invernadero, la parte restante se almacenará en un depósito de agua.

Los alimentos procederán del invernadero. En el invernadero plantaremos verduras como: espinacas, lechugas, zanahorias y patatas. El invernadero utiliza luz hidropónica, siendo la energía generada por los paneles solares. También podemos sugerir que se lleven peces al espacio, ya que no consumen muchos recursos y son una fuente de buenas proteínas que los astronautas pueden comer de vez en cuando.

La única fuente de electricidad será la luz solar. Como el Campamento Lunar está cerca del polo sur, la luz solar estará disponible en cualquier momento que no sea cuando se produzcan eclipses lunares. Sin embargo, las baterías se cargarán mucho antes del eclipse, asegurando que el Campamento Lunar no se quede sin electricidad.

Utilizaremos varias plantas, como las algas, porque producen O2 a partir de nuestras emisiones de CO2. Como utilizan mucho espacio (8 metros cuadrados por persona), también utilizaremos la electrólisis del agua para separar el O2 y el H2, el O2 se utilizará para respirar y el H2 como combustible para cohetes. Obtendremos nitrógeno de la Tierra al principio de la construcción del campamento lunar, para que la atmósfera de nuestro campamento lunar se parezca lo más posible a la de la Tierra.

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Nuestro campamento lunar protegerá a los astronautas con gruesas capas de hormigón y capas de polietileno para la radiación solar. Las capas se alternarán en caso de que una de ellas pueda corromperse. No queremos ninguna fuga de aire. Habrá salas de entrada especiales para los astronautas cuando salgan del Campamento para que no pierdan aire y vuelvan a entrar en él con seguridad.

Después de despertarse, comer y terminar las necesidades personales, la tripulación empezará el día comprobando los sistemas de mantenimiento de los trajes de vida y de trabajo, pero también limpiando y manteniendo la zona (quitar el polvo de los paneles solares, comprobar el filtro de agua, alimentar a los peces).

Después de asegurarse de que todo funciona bien, empezarán a trabajar (investigación, ampliación de la base, recogida de suelo lunar para examinar los átomos que lo componen).

Para estar en forma y por la salud de la tripulación, también practicarán ejercicios físicos, durante un largo periodo de tiempo.

Ir a una misión de este tipo conlleva sus riesgos, sobre todo para la salud mental, por lo que el tiempo que queda al final del día es para recrearse, entretenerse y hablar con los seres queridos de la Tierra.